Los amarres del puerto de Barcelona anulan definitivamente la huelga de ACN | barcelona | Economía
Los amarres del puerto de Barcelona han suspendido definitivamente la huelga iniciada el pasado lunes después de que la asamblea de trabajadores ratificara el preacuerdo de los sindicatos con la dirección de la empresa. Con entre el 96% y el 97% de los votos a favor (a la espera de la proyección final), los trabajadores firmaron un acuerdo que equipara las cinco escalas salariales existentes tras la fusión de Amarres y Cemesa.
El acuerdo también prevé que las nuevas contrataciones alcancen el mismo nivel salarial que el personal en cuatro años; que habrá un mínimo de 18 personas por turno, tanto diurno como nocturno, y que los turnos seguirán siendo de 3 días laborables y 3 días de descanso consecutivos.
Fuentes sindicales explicaron que el acuerdo tendrá que ser aprobado el 1 de febrero en la Inspección de Trabajo. De no llegarse a los extremos, la huelga se reanudaría en el 2º atraque «y en los recién llegados».
En cuanto a las nuevas contrataciones, se establece que dentro de cuatro años cobrarán la misma cantidad que una persona ya experimentada, pero partiendo de una base del 75% del subsidio total. Si estas personas son contratadas por tiempo determinado, el tiempo trabajado les computará, en caso de reincorporación, a los cuatro años necesarios para alcanzar la igualdad de remuneración. Además, se eliminó el compromiso de la empresa de contratar a personas que anteriormente habían ocupado el puesto.
Además, habrá un mínimo de 18 personas por turno frente a las 14 defensas de la empresa, tanto de día como de noche. También elimina las diferencias que existían hasta ahora en las indemnizaciones por accidentes o enfermedades o incluso en las prestaciones de tres años, entre otras cosas. Otro acuerdo prevé una regularización salarial del 6,7%. Algunos trabajadores no han sido regularizados bajo el CPI desde 2012.
El acercamiento entre ambas partes ya ha llevado este jueves a los sindicatos a suspender la protesta hasta el sábado para dar tiempo a la empresa a ultimar el borrador final del acuerdo. Sin embargo, esta mañana los trabajadores realizaron una manifestación ya programada pidiendo una mejora de las condiciones laborales frente al World Trade Center de Barcelona.
La huelga comenzó en la madrugada de este lunes con un servicio mínimo del 70%, que los diputados calificaron de «absolutamente abusivo» y retrasos de media de una a dos horas en los barcos que debían atracar en el puerto de Barcelona. Estos retrasos persistieron a lo largo de los días de la protesta y provocaron que algunos cruceros y cargueros entraran en cuenta más tarde.
El conflicto se originó a partir de la fusión entre las empresas Mooring y Cemesa, que dio lugar a una empresa resultante, Amarres de Barcelona. El nuevo operador sustituyó a los trabajadores de las empresas anteriores y que llegaban a la nueva empresa con escalas salariales diferentes para los mismos puestos de trabajo. Por eso, una de las principales demandas ha sido la unificación de salarios, la actualización de los salarios, ya que en algunos casos están congelados desde 2012 y que las condiciones pactadas en este convenio estén vigentes para los trabajadores que ingresarán en el futuro. .