Ilícito Francesc Conesa, hasta ahora obispo de Menorca, sustituye a Novell en Solsona | Mireia Rourera | Barcelona | Sociedad
Mireia Rourera – Barcelona
Xavier Novell, el ex obispo de Solsona, ya es una historia en esta diócesis, ya que el Vaticano, con inusitada rapidez, anunció ayer el nombre de su sucesor. Será Francesc Simó Conesa Ferrer, nacido en Elche hace 60 años y, durante cinco años, obispo de Menorca.
Doctor en Teología (1994) y Filosofía (1995) por la Universidad de Navarra, perteneciente al Opus Dei, Conesa Ferrer es capellán desde 1985. Según informó ayer la Conferencia Episcopal de Tarragona (CET), ha desarrollado su ministerio sacerdotal. casi al cien por cien en la diócesis de Orihuela-Alicante, donde fue vicario parroquial de la parroquia de Nuestra Señora del Carmen en Elche (1985-1987), de la Inmaculada Concepción de San Vicente del Raspeig (1994-1996) y de la Virgen de las Gracias de Alicante (1997). De 1998 a 2014 fue Vicario General de la Diócesis de Orihuela-Alicante y en 2016 el Papa Francisco lo nombró Obispo de Menorca.
Ayer, en rueda de prensa en Ciutadella, Conesa Ferrer anunció que hasta su toma de posesión el 12 de marzo continuará en Menorca como administradora apostólica. El nuevo obispo de Solsona es también miembro de la Comisión Episcopal para la Doctrina de la Fe de la Conferencia Episcopal Española (Ce), que preside el cardenal de Barcelona Joan Josep Omella.
El obispo de Vic, Romà Casanovas, que desde el pasado mes de agosto -cuando Xavier Novell sorprendió al anunciar su dimisión- es administrador apostólico en funciones de Solsona, dijo ayer que Francesc Conesa visitará próximamente la capital de Solsona y mantendrá encuentros con la comunidad religiosa. Mucho trabajo aguarda al nuevo obispo, especialmente para reconstruir la confianza con los capellanes de la diócesis, que en su mayoría se enfrentaron a Xavier Novell, intolerante con un ultraconservadurismo lejos del carácter de un obispado que aún lleva la impronta del obispo Deig. También tendrá que ganarse la confianza de algunos feligreses, muy lejos de Novell, y más aún después de que se hizo público que había instado a varios hombres a participar en terapias para «curar» la homosexualidad.
El obispado de Solsona ha vivido en una especie de montaña rusa desde que el controvertido Xavier Novell, de 52 años, anunció que dejaba el cargo por «razones personales». Hoy, casado de civil con una mujer e hijos divorciados, escritor de novelas satánico-eróticas, de quien está esperando gemelos, ha perdido todos los poderes y derechos de un obispo, aunque la Iglesia no ha logrado quitarle el estatus. del obispo emérito. Tras dejar su trabajo como prelado y enterarse de que enviaba currículos a empresas del sector agrario (es agrónomo), Novell encontró trabajo en la empresa Semen Cardona, dedicada a la preparación de dosis para inseminación artificial de cerdos.